Grupos Funcionales
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Descripción:
Los grupos funcionales son átomos o conjuntos de átomos que presentan características químicas particulares y determinan las propiedades y reactividad de los compuestos orgánicos. Estos grupos pueden unirse a una cadena de carbono o a un anillo, y se representan mediante fórmulas químicas específicas.
Algunos ejemplos de grupos funcionales comunes incluyen los alcoholes (-OH), los aldehídos (-CHO), las cetonas (-C=O), los ácidos carboxílicos (-COOH), los ésteres (-COO-), las aminas (-NH2), las amidas (-CONH2), los haluros de alquilo (-X, donde X representa un halógeno) y muchos otros.
Los grupos funcionales determinan las propiedades físicas y químicas de los compuestos orgánicos, como su polaridad, solubilidad, acidez o basicidad, capacidad de formar enlaces de hidrógeno, entre otras. Además, los grupos funcionales también influyen en las reacciones químicas en las que participan los compuestos orgánicos.
El conocimiento de los grupos funcionales es fundamental en química orgánica, ya que permite la identificación, clasificación y comprensión de las propiedades y reacciones de los compuestos orgánicos. Además, el estudio de los grupos funcionales proporciona las bases para la síntesis de nuevos compuestos y el diseño de moléculas con propiedades específicas.
Formulas:
Además de las cadenas hidrocarbonadas, en los compuestos orgánicos pueden existir átomos o grupos de átomos diferentes del carbono e hidrógeno, que le aportan al compuesto una determinada reactividad, y que reciben el nombre de grupos funcionales. En tales casos los compuestos pueden considerarse derivados de los hidrocarburos, tanto alifáticos como aromáticos, por sustitución de uno o más de sus átomos de hidrógeno por tales grupos funcionales.
Para nombrar estos compuestos se pueden seguir varios sistemas, de los cuales los más usados son:
a) La nomenclatura radicofuncional: el nombre se forma con dos palabras, la que indica la clase de función y el nombre del radical. Por ejemplo: alcohol etílico, éter dietílico.
FUNCIÓN (ALCOHOL) - RADICAL (ETÍLICO)
b) La nomenclatura por sustitución: el nombre se forma partiendo del hidrocarburo correspondiente y anteponiendo un prefijo o añadiendo un sufijo, según los casos, para indicar el grupo funcional existente. Si hay varios grupos funcionales, el sufijo se reserva para el más importante, y los demás se nombran mediante prefijos. Por ejemplo: etanol, etoxietano.
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